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jueves, 28 de mayo de 2009

Un Milagro Para Carmelo


La imagen de la Virgen Rosa Mística Peregrina lo acompañó siempre, lo cuidó y lo protegió.
Corría Marzo del 2003 en Caracas, Carmelo un compañero de fútbol de mi hijo fue hospitalizado de emergencia, según decían estaba deshidratado. A la 5 de la tarde de ese domingo, fuimos a la clínica para visitarlo, al ver tanta gente y familiares yo me cuestioné que hacíamos allí mi marido y yo, sentía que sobrábamos, además yo sólo conocía al niño que tenía 11 años y a su padre. Pero al mismo momento que lo pensaba, una voz me respondía "tienes que estar acá". Al entrar a la zona de pediatría, conocí a su mamá y luego de presentarnos y preguntar por el niño. le Dije- ¿Quieres que recemos? Inmediatamente me respondió que sí, de todos modos debíamos esperar, en ese preciso momento le estaban haciendo una punción para descartar meningitis. Comenzamos a rezar y yo sentía al niño tranquilo y sonriente. Le dije a su mamá - Quédate tranquila todo va a salir bien, en ese momento el médico salió y dijo- Nunca vi un niño que mientras lo pinchan se ríe. Inmediatamente comprendí y dije - Es que él estaba en brazos de su Madre. Él contesto si, si,… al darme cuenta que él no me había entendido. Si, con su Madre del cielo, inmediatamente los ojos y la sonrisa del galeno me hizo dar cuenta que ahora sí sabía quien acompañaba al niño. En realidad a medida que pasaba el tiempo, a su alrededor se respiraba preocupación, pero nosotras seguíamos rezando, llamé a mi mamá para que le avisara al Padre Vicente Mancini y que pusieran al niño en cadena de oración. Como para Dios todo está previsto, mi amiga Velia estaba también en emergencia al contarle que hacia yo allí, nos pusimos a orar, ella recibió que debían sacar al niño y llevarlo a otra Clínica de Caracas. Yo le dije no pretenderás que yo vaya a decirle a una señora que acabo de conocer – Sabe mi amiga dice que se lleve a su hijo… Inmediatamente le pedimos a Dios que condujera todas las cosas según su voluntad y así lo hizo, al cabo de 3 horas la Clínica estaba trasladando al muchacho a la otra que Velia había dicho porque estaba completa la Intensiva Pediátrica aquí. Al día siguiente nos llamaron a las 6 de la mañana para informarnos que Carmelo estaba muy grave y que estaban esperando un desenlace fatal, yo no sentía como cierta esa información nada resonaba así en mi cuerpo, todo lo contrario así que me fui al grupo de oración del Padre Vicente y como nada es casualidad se encontraba allí la señora Carmela una gran sanadora y le pedí que le hiciera oración, ambas nos pusimos a rezar, ella recibió el mensaje que todo iba a salir bien y que lo estaba viendo ponerse el cinturón en el pantalón, dile a su familia que sigan orando, que la Virgen está tomando este caso, este es una aprendizaje para la familia a través del niño y yo recibí que debía decirle a la familia “NO importa lo que vean, NO importa lo que oigan, NO importa lo que le digan, él va a salir de esto”. Fui inmediatamente a la Clínica llevándole la imagen consagrada de la Rosa Mística para que los acompañara y acrecentaran su fe. Inmediatamente colocamos a la Virgen dentro en Terapia y comenzamos a pedirles a Dios y a su Madre por la mejoría del pequeño Carmelo. Vino de visita el Padre Miguel Silvino (Director del Colegio del niño) y le dio el Sacramento de la Unción de los enfermos, este sacramento confiere al cristiano una gracia especial para enfrentar las dificultades propias de una enfermedad grave o vejez. "¿Está enfermo alguno entre vosotros? Llame a los presbíteros de la Iglesia, que oren sobre él y le unjan con óleo en el nombre del Señor. Y la oración de la fe salvará al enfermo, y el Señor hará que se levante, y si hubiera cometido pecados, le serán perdonados" (St 5, 14-15).
Hora a hora todo se complicaba, su corazón, sus pulmones, la vista, el hígado, todo, pero toda su familia entregada a la oración, luego del segundo día, a medida que rezábamos se veían pequeñas mejorías. Una noche Melina me dijo que debían llevarlo a hacerle una tomografía, porque creían que tendría problemas en la cornea, yo sentí que no lo sacarían de Intensiva esa noche, y así fue, a partir de eso, cada cosa que pedíamos en oración lo recibía el niño, los moretones iban cesando, la fiebre iba bajando y así sucesivamente. Uno de esos días de tanta angustia, pero de mucha fe, mientras su mamá, la enfermera y yo rezábamos el Ave María, de repente se nos olvidó la letra, y fue conmovedor ver como el niño continuó las siguientes palabras a pesar de estar entubado, completamente sedado y lleno de cables.
Todo fue pasando lentamente hasta que la madrugada del día 13 de mayo el día de Rosa Mística el niño reaccionó perfectamente. Lo primero que pidió fueron sus almohadas, y que quería comer, no tenía ni idea de todo lo que había pasado, tal como lo sabíamos “este crecimiento es para la familia a través del hijo”. Y así pudimos ver el Milagro, tal es así que en la clínica lo llamaban el milagrito. Cuando Melina le agradeció a uno de los médicos él dijo yo no hice nada todo lo hizo Dios, nosotros mismos dudábamos de que Carmelo superara esto, el doctor compartió el caso con médicos americanos, nadie lo podía creer. Además como Jesús dijo, “ayúdate que te ayudaré, busca y encontrarás, golpea y te abrirán" todo fue tal y como debía ser, cuando el amor de Dios actúa es perfecto, a Carmelo no le quedaron secuela alguna, salió en tiempo record de la clínica, comenzó a hacer deportes antes del tiempo que esperaban los doctores. Hoy es un adolescente maravilloso con ilusiones, metas, se comporta como todos los muchachos de su edad, pero él sabe que la Virgen le dio una segunda oportunidad, porque cuando despertó, dijo que había soñado que estaba en un ascensor y cuando entró a una habitación los doctores gritaron y entonces él entró en un túnel en el que abrió una puerta y como no había nadie se durmió. (Creemos que esto sucedió en un momento que se le estaba yendo el pulso)Después de tantos días de preocupación, pero acompañados por el inmenso amor de la Santísima Virgen María que se hizo sentir siempre y a cada minuto, con el aroma a rosas en la habitación a pesar de no haber ni una, por la escarcha, en la sabiduría como los médicos tomaban las decisiones de lo que se debía hacer, por la cantidad de cadenas de oraciones que se hicieron por la salud del niño, unos traían escarchas, otros agua de Lourdes, de Fontanella, velas de San Antonio, estampas de Virgen de Coromoto, aceite de la Virgen Milagrosa y lo más importante la fe que se veía en su madre, no lloró nunca en esos días, sabía que su hijo saldría de esto, estaba convencida que todo pasaría, fue conmovedor como le decía a las personas que venían a visitarlos - ¿Quieren rezar? todos los días a las 3 p.m. los padres, los hermanos familiares y amigos rezábamos el Rosario de la Misericordia y sin saber como, tenía a todo el mundo rezando en la Clínica.
Todos las noches su mamá le colocaba a Carmelo las escarchas, el agua, el aceite que le traían con mucha fe, todo esto a la vista de enfermeras y médicos tanto así que la última noche la enfermera y el terapeuta presente le pidieron a Melina que les pusieran escarcha y ella preguntó sorprendida . ¿Ustedes tiene fe? Respondieron que sí, además sería imposible no tenerla con todo lo que ellos pudieron ver en esos días, creo que hasta Santo Tomás quedaría boqui abierto.
El 13 de Mayo día de la Rosa Mística fuimos con Melina a buscar rosas amarillas, blancas y rojas para ofrecerle a la Virgen en su día, luego de recorrer varias floristerías llegamos casi sobre la hora de cierre a una cercana a la clínica que nos dijo que enviaría las flores a Terapia pero que no había rosas amarillas.
Por la tarde alguien recibió las flores y estaban allí en el lobby el ramito con los 3 colores jamás supimos como pasó. Por la noche Melina lleva las flores a la Intensiva aunque estaban un poco caiditas, a las 2 a.m. ella está rezando de rodillas frente a la imagen de la Virgen pidiendo con fervor por la sanación de su hijo Carmelo y como respuesta siente un profundo aroma a rosas, un escalofrío le recorre todo el cuerpo se para huele las rosas y en realidad comprueba que ellas no huelen nada instintivamente voltea a ver a su hijo y nota que aunque entubado por la boca el mueve la tráquea parecería que está respirando solo, tanto ella como la enfermera quedan impactadas. Sale del cuarto y llama a sus hijos y a su esposo para contarle lo sucedido. Uno de ellos le dice - Mamá estás loca Carmelo está muy mal, acabamos de verlo hace un rato, como ella insiste no tienen otra cosa que ir a comprobar lo sucedido, todos quedan boquiabiertos, era verdad, él estaba respirando solo. Ella dice: - nos vamos a casa todos a bañarnos y descansar a las 6 a.m. volvemos, su familia la miraba sorprendidos ya que nunca se movió de al lado de la cama de su hijo en todos esos días. Los padres se acostaron junto a sus dos hijos en la cama grande mientras hablaban y repasaban lo sucedido, nadie pudo dormir pero si agradecer a Dios y a la intensión de tantas personas. Pompeyo un sobrino de su esposo, a quien le habían encargado la dura tarea de preparar a los padres del niño porque todos agoraban un desenlace fatal para el pequeño Carmelo. Por lo tanto el temprano pasaba por la Clínica todos los días pero ese 14 algo fue diferente e inesperado a las 7 a.m. llamó a Melina y le dijo -Tía no se que pasó aquí pero los médicos dicen que Carmelo está muy bien, así que traigan enjuague bucal, pasta dental, cepillo de dientes y apúrense.
Al llegar a la Clínica los familiares se cruzan con el Dr. Leyba Amadeo, quien súper feliz les dice: - no se que pasó pero a este niño hay que sacarlo de terapia. Esta muy bien y en tono de chiste comenta: Se ve que Carmelo tiene un carácter, no hace más que quejarse de que las almohadas son duras. El niño al ver a su familia se pone feliz porque estaba extrañado de estar allí no tenia conciente de los días que llevaba en terapia. La Virgen después de tantos ruegos finalmente hizo el milagro el preciso día en que Carmelo cumplía sus 12 años, tremendo regalo recibía. Comenzaron las placas, los análisis, nadie podía creerlo, el niño perdió 10 kilos, todo continuó su curso normal, el día lunes el Dr. Le comenta a Melina que la Virgen Rosa Mística había llorado lágrimas de sangre y estaba expuesta en el Colegio Belén, por supuesto en cuanto salio Carmelo de la Clínica sus familiares y yo fuimos a agradecerle. Una semana después el infectólogo Dr. Guido Tata Cumaná (hombre de mucha fe) quien ya no se encuentra entre nosotros llamó a Melina para decirle: Señora usted es una madre afortunada al llevarse su hijo a su casa en perfecto estado, quiero que sepa que yo no hice nada. No he visto en toda mi vida un caso así, en las otras dos oportunidades las personas quedaron con muchas secuelas, yo creo en Dios en la Virgen de Coromoto y se que su hijo obtuvo un Milagro. Al llevar al niño al primer control recibe toda la información referente al caso y el Dr. Leyba le explica: tuvo una Falla Multisistémica debido a un virus de (adenovirus cosackie) que le entró por el lagrimal, iniciándose como una conjuntivitis pero esto desencadenó meningoencefalitis, pericoarditis o miocarditis, insuficiencia renal, bronconeumonía con derrame pleural, hepatitis, conjuntivitis bilateral, infección respiratoria alta, trastornos del sensorio, edemas miembros inferiores, todo esto conlleva a lo que se llama Falla Multisistémica.
Estoy segura que sus padres, sus hermanos con esta dura prueba aumentaron aún más su fe, todos los amigos, conocidos, médicos, enfermeras que compartimos estos días, tenemos la certeza de que existen los milagros y yo estoy inmensamente agradecida a mi Dios y a la Virgen que me permitiera nuevamente ser el instrumento de su sanación, y comprobar que realmente la fe mueve montañas y que Dios nunca nos abandona.
Sólo debemos abrir nuestro corazón a la fuerza del amor, del servicio y asentir todo tal y cual es, porque nuestra mente no comprende lo que nuestro alma sabe, necesita y conoce.
Aquí podemos ver radiografías, fotos, informe médico. Agradecemos a la señora Melina por autorizarnos esta publicación




Carmelo sabía que todo pasaría. Confiaba secretamente en Dios y en la Virgen María, además pronto iba a tomar su primera comunión y un lugar para este maravilloso niño estaba reservado, por lo tanto él no podía faltar a ese tan importante acto.

Asi estaban sus ojos durante muchos días.



Hematomas que presentaba en todo el cuerpo (rodilla).

Tomada el día 10 de marzo 2003



Tomadas el día 11 de marzo a las hs. 10.5o a.m.



Tomada el día 11 de Marzo a las hs. 6.25 p.m.




Tomada el 12 de Marzo



Tomada el 13 de Marzo



Tomada el 14 de Marzo

>>>>>>Gracias Dios Mío<<<<<<

Partes Médicos.

aaaaaaaaaaaaa






Nota: Melina me comenta que recuerda que su hijo tuvo un sueño unos días antes de enfermarse, que él que se lo contó pero que ella no se acordaba.
Él le dijo: ¿Mamá te acuerdas del cuadro de la tía Carolina que tiene la nonna en su casa? Soñé que estábamos en nuestra casa y yo jugaba con la pelota en el pantry y tú estabas en la sala, de repente tú gritaste fuerte, yo corrí donde estabas tú y vi a la tía detrás tuyo igualita al cuadro pero como humo. Al escuchar este sueño yo estaba asombrada él se refería a mi hermana que falleció en un accidente cuando ella tenía 12 años y yo 19 años, se llamaba Carolina por eso mi hijo se llama Carmelo CARLO en honor a ella, y cuando él nació yo le pedí que siempre me lo protegiera.
Debo decirles que en mis oraciones yo le pedía también a mi hermana Carolina que intercediera, pues a mí me había tocado vestirla y verla en la autopsia por ser la mayor de las hijas ya que mis padres estaban destrozados, yo miraba a mi hijo casi de su misma edad, allí inconsciente y le rogaba que no me dejara pasar otra vez por algo igual.

Cuando Carmelo se recuperó totalmente, su hermano mayor Antonio nos envió una tarjeta de agradecimiento para todos los que de una u otra manera acompañamos a la familia en tal difícil situación y dice así:
aaaa
Es maravilloso saber que puedes contar con algunas personas...
Gracias por el apoyo incondicional en los momentos en que más lo necesitábamos.
Dios los Bendiga
Que Dios ilumine tu vida y te de la felicidad que te mereces, vivamos la vida recordando lo insignificantes que podemos llegar a ser sin la Fe, ella es la única que nos da soporte y calma en momentos donde la impotencia junto con el miedo reinan dentro de nuestros corazones.
Vivamos siempre en la Gracia de Dios y verán como estarán agradecidos toda la vida al igual que lo estamos nosotros ahora. aa
Antonio N.S.S.

Adriana Fresta de Venutolo

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