Recientemente tuve la oportunidad de ver una publicidad excelente, desde la música, la idea, las imágenes, todo llamó mi atención, principalmente la cantidad de spot publicitarios que vi durante unas pocas horas que estuve delante del televisor.
Decía más o menos así “Milagrus es un producto lácteo, este contiene Acti Regulares lo cual ayuda a la regularización del intestino y mejorar la movilidad del tránsito intestinal. Su consumo debe estar dentro de un marco equilibrado y se recomiendan de 2 a 3 porciones para su efecto óptimo. Milagrus ® es el único yogurt cuyo funcionamiento está científicamente comprobado: estudios clínicos a nivel mundial lo avalan.”El yogurt lo encontramos en 3 sabores, bla, bla, bla”, después me llamaron la atención otras publicidades que ofrecían cereales, caramelos y galletas, también para las personas que sufren de estreñimiento.
Sentí que todas las propagandas nos decían: no se preocupe… sufrir de estreñimiento es normal, todo el mundo lo padece… ¿Por qué no le pasaría a usted? Además, si su abuela, su madre lo padecen, toda su familia sufre de lo mismo, finalmente usted acaba de pasar a ser un número más en las estadísticas bla, bla, bla, aquí esta el Yogurt Milagrus, El Cereal Solucionitis, las Galletitas Rapidex, y los caramelos Másquelisto.
Necesitamos tomar conciencia, esta forma de mirarnos es la más fácil, la medida rápida, de la poca capacidad que tenemos a veces de buscar las verdaderas y definitivas soluciones, de la necesidad imperiosa que tiene el ser humano de dependencia, entonces ahora algunos decidimos depender de estos sustitutos para solucionar un problema emocional en vez de hacer algo grande y bueno por nosotros.
Por que no hacer una verdadera publicidad sobre el problema: “Señor, señora si usted sufre de estreñimiento algo está sucediendo con sus sentimientos, con sus recuerdos, hay fuertes emociones dentro de usted que ya están afectando su cuerpo físico, Señor, señora, Dios hizo su cuerpo perfecto, y si esto le está sucediendo es porque algo no está en orden, despierte y advierta que hay algo más grande dentro de usted que está necesitando de su verdadera atención”. Por supuesto esto no fomentaría la venta de estos artículos.
Encontré estos mail en la pagina WWW de uno de los productos, los cuales me motivaron a escribir este artículo, por favor reflexionemos sobre ellos.
“Necesito saber si puedo darle este yogurt a mi hija que tiene 3 años y tiene el tránsito intestinal muy lento, por favor necesito una pronta respuesta desde ya muchas gracias” Cristina
“Hola mi hija es estítica tiene 1 año le podré dar Milagrus” Carolina
Aquí, yo puedo ver la ilusión: La persona pide… díganme que si, por favor, porque eso es lo que ustedes me han estado vendiendo, Ilusiones, de este modo no tendré que hacer nada más para que mi pequeña mejore, porque si me dicen la verdad tengo que hacerme cargo de mi vida tal y como es, para generar cambios, de ese modo mi hija de apenas 3 años y yo no sufriremos estas consecuencias.
Estoy segura que Cristina y Carolina no saben que sus hijas aún están muy unidas a ellas, tan unidas que pueden sentir todo lo de ellas, si lo supieran dirían: pero díganme la verdad porque estoy dispuesta a trabajar y reconocer en mí todos los sentimientos y las emociones que me están haciendo daño y provocan que el cuerpo exprese alguna alteración.
“Trabajar con nosotros mismos no es fácil, es de valientes, más fácil es meter la cabeza en la tierra como el avestruz, criticar, juzgar y desvalorizar a aquellos que intentan hacer algo diferente con sus vidas, pero yo se que Tú eres un/a valiente más, jamás desperdicies las oportunidades que te da la vida para crecer internamente, veras que siempre hay cosas nuevas que descubrimos sobre nosotros.”
Decía más o menos así “Milagrus es un producto lácteo, este contiene Acti Regulares lo cual ayuda a la regularización del intestino y mejorar la movilidad del tránsito intestinal. Su consumo debe estar dentro de un marco equilibrado y se recomiendan de 2 a 3 porciones para su efecto óptimo. Milagrus ® es el único yogurt cuyo funcionamiento está científicamente comprobado: estudios clínicos a nivel mundial lo avalan.”El yogurt lo encontramos en 3 sabores, bla, bla, bla”, después me llamaron la atención otras publicidades que ofrecían cereales, caramelos y galletas, también para las personas que sufren de estreñimiento.
Sentí que todas las propagandas nos decían: no se preocupe… sufrir de estreñimiento es normal, todo el mundo lo padece… ¿Por qué no le pasaría a usted? Además, si su abuela, su madre lo padecen, toda su familia sufre de lo mismo, finalmente usted acaba de pasar a ser un número más en las estadísticas bla, bla, bla, aquí esta el Yogurt Milagrus, El Cereal Solucionitis, las Galletitas Rapidex, y los caramelos Másquelisto.
Necesitamos tomar conciencia, esta forma de mirarnos es la más fácil, la medida rápida, de la poca capacidad que tenemos a veces de buscar las verdaderas y definitivas soluciones, de la necesidad imperiosa que tiene el ser humano de dependencia, entonces ahora algunos decidimos depender de estos sustitutos para solucionar un problema emocional en vez de hacer algo grande y bueno por nosotros.
Por que no hacer una verdadera publicidad sobre el problema: “Señor, señora si usted sufre de estreñimiento algo está sucediendo con sus sentimientos, con sus recuerdos, hay fuertes emociones dentro de usted que ya están afectando su cuerpo físico, Señor, señora, Dios hizo su cuerpo perfecto, y si esto le está sucediendo es porque algo no está en orden, despierte y advierta que hay algo más grande dentro de usted que está necesitando de su verdadera atención”. Por supuesto esto no fomentaría la venta de estos artículos.
Encontré estos mail en la pagina WWW de uno de los productos, los cuales me motivaron a escribir este artículo, por favor reflexionemos sobre ellos.
“Necesito saber si puedo darle este yogurt a mi hija que tiene 3 años y tiene el tránsito intestinal muy lento, por favor necesito una pronta respuesta desde ya muchas gracias” Cristina
“Hola mi hija es estítica tiene 1 año le podré dar Milagrus” Carolina
Aquí, yo puedo ver la ilusión: La persona pide… díganme que si, por favor, porque eso es lo que ustedes me han estado vendiendo, Ilusiones, de este modo no tendré que hacer nada más para que mi pequeña mejore, porque si me dicen la verdad tengo que hacerme cargo de mi vida tal y como es, para generar cambios, de ese modo mi hija de apenas 3 años y yo no sufriremos estas consecuencias.
Estoy segura que Cristina y Carolina no saben que sus hijas aún están muy unidas a ellas, tan unidas que pueden sentir todo lo de ellas, si lo supieran dirían: pero díganme la verdad porque estoy dispuesta a trabajar y reconocer en mí todos los sentimientos y las emociones que me están haciendo daño y provocan que el cuerpo exprese alguna alteración.
“Trabajar con nosotros mismos no es fácil, es de valientes, más fácil es meter la cabeza en la tierra como el avestruz, criticar, juzgar y desvalorizar a aquellos que intentan hacer algo diferente con sus vidas, pero yo se que Tú eres un/a valiente más, jamás desperdicies las oportunidades que te da la vida para crecer internamente, veras que siempre hay cosas nuevas que descubrimos sobre nosotros.”
Adriana Fresta de Venutolo
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